El himno nacional a manos de Lady Gaga completó el espectáculo de la noche del fútbol americano.
En medio de la temporada de premios y a puertas de las nuevas jornadas de las semanas de la moda, el Super Bowl se convierte en una de las citas más importantes del año. Y no solo por lo que sucede en el terreno de juego o por las astronómicas cifras que genera …en ganancias y espectadores– , si no por el espectáculo del medio tiempo que año tras año cuenta con los artistas más importantes de la escena musical.
Para su edición número 50 en la que los Denver Broncos fulminaron a los Carolina Panthers, el evento logró reunir en un mismo escenario a cuatro grandes talentos de nuestra generación: Beyoncé, Coldplay, Lady Gaga y Bruno Mars. Un cuarteto de ensueño que nos hizo vibrar con cada una de sus interpretaciones.
La primera en subir al escenario del Levi’s Stadium en Santa Clara, California) fue la “mamá monster”. Gaga impresionó a todos los asistentes con un total look en rojo brillante de Gucci mientras que su poderosa voz resonaba fuerte con cada melodía del himno nacional de Estados Unidos.
El turno entonces fue para Coldplay. La banda británica que tantas quejas levantó tras ser anunciada como el show estelar del show de medio tiempo del Super Bowl, irradió energía y puso a corear sus canciones a todos los asistentes. Aunque ‘Hymn for the Weekend’ no hizo parte de su repertorio, pudimos disfrutar de otros éxitos como Yellow, Viva La Vida, Paradise y Adventure Of A Lifetime.
El perfecto equilibrio de la escenografía, las letras y la energía de la banda liderada por Chris Martin se rompió con un estruendoso estallido de los platillos de Uptown Funk. Así, de un golpe, Bruno Mars apareció enfundado en un traje de cuero negro, gafas oscuras y cadenas de oro, al mejor estilo de Run- D.M.C en 1970.
El tiempo se detuvo y los alientos se contuvieron por un instante. Era el momento. Era el turno de Beyoncé.
Enfundada en un body de DsQuared2 inspirado en la chaqueta de cuero y apliques dorados cruzados en el pecho, de Michael Jackson, Queen B apareció en el escenario con su séquito de sensuales e imponentes bailarinas bailando al ritmo de su nuevo single Formation, y posteriormente en un back 2 back con Bruno Mars.
La suma de todas las partes no pudo ser mejor. El Super Bowl 2016 fue una noche mágica en la que la música, la moda y el deporte generaron una explosión de colores que nos invitó a creer en el amor (#BelieveInLove). Speechless!